Salvador Illa y Carles Puigdemont quieren ser el nuevo president de la Generalitat, pero para lograrlo, necesitan de apoyos. Los 42 y 35 escaños de PSC y Junts, respectivamente, siguen alejados de los 68 de la mayoría absoluta que requiere el Parlament para formar Govern. Este jueves, Puigdemont aseguró que irá "hasta el final" para intentar gobernar, mientras que Illa consideró que sería un "error" apoyar su investidura.
Los socialistas cuentan, a priori, con los seis votos de Comuns Sumar, a pesar de que en campaña, la formación encabezada por Jéssica Albiach pusiera una línea roja a los proyectos estrella de su líder, Salvador Illa -el Hard Rock, la ampliación del aeropuerto y terminar la B-40-. Con los votos de ERC suman. Sin embargo, desde el pasado domingo, los republicanos se han mantenido en la postura de no negociar y situarse en la oposición.
Por ello, tanto Illa como Puigdemont, quien necesita más apoyos para formar una mayoría, tratarán de convencer a una Esquerra huérfana de líderes hasta la celebración del Congreso Nacional, el próximo 30 de noviembre, para que cedan y den el "sí" el día de la investidura.
El candidato de Junts, Carles Puigdemont, optó por mover ficha primero y reunió este jueves a los 35 diputados electos en las urnas y a la cúpula del partido. El expresidente de la Generalitat y eurodiputado afirmó que el bloque independentista "suma bastantes diputados más que el bloque constitucionalista de progreso" formado por "PSC y Comuns", por lo que existen "más opciones de un gobierno en minoría" de Junts.
"En un escenario de mayoría simple, tenemos más opciones nosotros de gobierno y mayoría coherente. No haciendo inventos esperando a que PP o Vox se abstengan", continuó desde Perpignan (Francia).
Además, apuntó que "el señor Sánchez gobierna en minoría, porque los socios no suman mayoría absoluta, y tienen que negociar con los grupos de la oposición", tras lo que dijo: "Aquel que intente deslegitimar estará intentando deslegitimar la democracia".
También señaló que ya ha iniciado "contactos discretos" con la intención de formar un Govern en solitario. "Tenemos una oportunidad y la agotaremos", aseguró, y consideró que tienen "opciones de formar un gobierno suficientemente sólido". En este sentido, expresó "el máximo respeto por los procesos internos que puedan tener [ERC] i la máxima disposición a dialogar con todos los actores de 'independentismo para construir una mayoría de gobierno".
Sobre las negociaciones, dijo que se llevarán a cabo como las que tuvieron lugar para la investidura de Pedro Sánchez, con "poca gente, mucha discreción, asumiendo la gravedad del momento y dando cuenta de los acuerdos".
Illa cree que sería un "error" apoyar a Puigdemont
El líder socialista también habló este jueves, en su caso en una entrevista en la Cadena Ser. Illa aprovechó para descartar la posibilidad de apoyar una investidura del de Junts, que consideró que sería una equivocación y que contradeciría la voluntad de la ciudadanía.
No obstante, el del PSC no ha querido atacar la postura de Puigdemont, ya que "todo el mundo tiene derecho a plantear sus opciones". Illa quiso mostrar respeto a la táctica del expresidente siempre y cuando sea "de acuerdo a las normas".
Un respeto a Puigdemont que no rompe con la intención de Illa de "liderar una nueva etapa" en Cataluña. El exministro quiere presidir la Generalitat porque "los catalanes me han otorgado la confianza para ello", aunque como su rival político, necesitará de esos apoyos para alcanzar la mayoría.
Mientras que Puigdemont aseguró que ha empezado a acercar posturas que le permitan aglutinar una mayoría, Illa prefirió mostrar "discreción" en cuanto a las negociaciones. De momento, si avisó que tiene que dar tiempo "para digerir y analizar" los resultados al resto de formaciones, y es que, los candidatos tienen tiempo hasta el 10 de junio -día después a las elecciones europeas- para hacer los primeros movimientos antes de que se constituya el nuevo Parlament.
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